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sábado, 20 de marzo de 2021

Purussaurus: El cocodrilo más monstruoso que ha existido

 Esta brutal criatura medía 13 metros de largo, siendo aún más grande que el Sarcosuchus.

El Sarcosuchus fue un cocodrilo monstruoso que existió hace 110 millones de años en África y Sudamérica, el cual medía hasta 12 metros de largo. Sin embargo, durante la Prehistoria existió otro animal parecido, pero que fue aún más grande y además su data es mucho más reciente: el Purussaurus, el cual medía 13 metros de longitud y existió hace unos 13 a 8 millones de años.

Si bien resulta lógico imaginarse un enfrentamiento aterrador entre un Purussaurus y un Sarcosuchus, de más está decir que debido a la lejana escala temporal en la cual ambos existieron, jamás se toparon el uno con el otro. Aunque de más está decir que semejante encuentro habría sido un choque de titanes, pero sólo hay que dejárselo a la imaginación, pues algo así nunca ocurrió.

 Hablar del colosal Purussaurus es referirse al que sin lugar a dudas fue el cocodrilo más grande que ha existido. Y esto no es sólo en lo relativo a su longitud, sino que también a su voluminoso cuerpo, ya que este monstruo medía más de dos metros de alto, es decir era digno de ser el protagonista de cualquier película de terror del género de animales bestiales, tales como "Tiburón" o "Anaconda". 

Purussaurus fue un género extinto de cocodriliano que existió en Sudamérica durante el Mioceno. Es un pariente lejano de los aligátores y caimanes modernos. Sus restos han sido hallados en Brasil, Colombia, Perú y Venezuela, y hasta ahora se sabe de la existencia de tres especies distintas pertenecientes a este género de reptil primitivo. 

sábado, 5 de septiembre de 2020

Granastrapotherium: El poderoso astrapotérido que vivió en Sudamérica

 Este mamífero prehistórico vivió en lo que actualmente son Colombia, Perú y Bolivia durante el Mioceno. 


Los astrapotéridos fueron una familia extinta de mamíferos placentarios del orden Astrapotheria, pertenecientes al clado Medioungulata. Estos animales habitaron diversos puntos de Sudamérica durante la Era Cenozoica (o Cenozoico). 

Dentro de los astrapotéridos estuvo el Granastrapotherium, corpulenta criatura que habitó lo que actualmente son Colombia, Perú y Bolivia durante el Mioceno (escala temporal perteneciente al Cenozoico). Sus restos fueron encontrados en el Desierto de Tatacoa (Colombia) en 1950, siendo calificados como una nueva especie recién en el año 1997. 

La especie tipo de este género fue el Granastropotherium snorki, el cual poseía una trompa muy parecida a la de los elefantes, y cuatro prominentes colmillos (dos arriba y dos abajo). Este herbívoro fue una criatura bastante voluminosa, que fácilmente sobrepasaba las tres toneladas de peso. 

Galería de imágenes: Granastrapotherium

 




domingo, 5 de julio de 2020

Monumento a Cahuide: El héroe mártir del Imperio Inca

Este guerrero fue un héroe durante la Batalla de Sacsayhuamán. En vez de rendirse frente a los soldados españoles, prefirió entregar su propia vida.
Cahuide y el conquistador.

Actualmente en la localidad de Maca, cerca de Arequipa (Perú), existe una escultura bastante única y llamativa, en la cual se representa un combate a muerte entre un guerrero inca y un soldado español. Sin embargo, no es un inca cualquiera, pues se trata de un noble conocido como Cahuide, que significa "jefe orejón" (ese era un símbolo de la realeza para esta civilización prehispánica).

No es mucho lo que se sabe de Cahuide. Sólo se conoce el año de su muerte: 1536, durante la Batalla de Sacsayhuamán, en la cual vencieron los españoles. Pese a la derrota, los incas brindaron una disputa realmente épica frente a un enemigo que era superior en cuanto a armamento.

El valeroso Cahuide portaba una adaraga (escudo de cuero), una porra y una espada. Provisto de esos tres elementos, se defendió como un león, y derrotó a cuanto soldado español pudo vencer. Luego de varios días de enfrentamiento, y para evitar caer en manos de sus contrincantes, optó por entregar su propia vida y lanzarse desde el torreón de Muyucmarca. Entregó su vida como un héroe, con tal de no ver con sus ojos la caída de su grandioso imperio.

jueves, 21 de mayo de 2020

La gallardía de Arturo Prat y las Glorias Navales de Chile

Este 21 de mayo se conmemora un nuevo aniversario del Combate Naval de Iquique, una fecha clave dentro de lo que fue la Guerra del Pacífico.

Antes que todo, quiero comenzar estas palabras admitiendo mi profundo respeto y aprecio hacia Perú y Bolivia, a quienes considero como países hermanos para nuestro querido Chile, pero que lamentablemente por motivos de la vida junto con diversos acontecimientos políticos e históricos, hemos terminado en conflictos belícos ya en dos oportunidades (Guerra del Pacífico y Guerra contra la Confederación). La Historia es para recordarla, pero también para aprender de ella y de sus errores. Ojalá nunca más tengamos que vernos enfrentados entre pueblos que compartimos una raíz cultural común a todos nosotros. Dios quiera que así sea.
Arturo Prat Chacón.

Una vez dicho esto, recalco la gallardía y valentía de Don Arturo Prat Chacón, quien un 21 de mayo de 1879 perdió su vida en combate, durante el hecho bélico que marcó a fuego lo que fue la Guerra del Pacífico... "¡Muchachos: la contienda es desigual, pero ánimo y valor. y espero que no sea ésta la ocasión de hacerlo!" fue la corta pero contundente arenga del capitán Prat antes de brincar desde La Esmeralda a la la superficie lustrosa del Huáscar, en un salto valeroso que lo llevó no sólo a la muerte sino que también a la eternidad.

Resulta curioso que en Chile se conmemore una derrota como fecha de las Glorias Navales, pues el Combate Naval de Iquique se perdió. Pero fue una derrota anímicamente tan significativa que pavimentó el camino para victorias futuras. Sin embargo, no todo fueron caídas estrepitosas para Chile durante esa jornada, ya que ese mismo día en el Combate Naval de Punta Gruesa, la modesta corveta Covadonga hundió a la fragata blindada Independencia. El inesperado desenlace del Combate de Punta Gruesa junto al empellón de haber perdido a La Esmeralda en crudo enfrentamiento fue un potente aliciente para la Armada Chilena. El 21 de mayo de 1879 fue la piedra angular de las próximas Glorias Navales chilenas durante la Guerra del Pacífico.

Sin embargo -y vale la pena recalcarlo- esta guerra no sólo significó sufrimientos para Chile, Perú y Bolivia. También hubo verdaderos héroes, y por ambos bandos: el sacrificio mártir de Arturo Prat, la impresionante destreza de Carlos Condell, la caballerosidad y rectitud del almirante Miguel Grau, el temple y valentía del coronel Francisco Bolognesi, o la visión de estratega que tuvo el general Manuel Baquedano. Todos, grandes héroes. Todos, grandes patriotas...

Almirante Miguel Grau, el caballero de los mares

Después de la victoria peruana en el Combate Naval de Iquique, el almirante del Huáscar envió una emotiva carta a la viuda de Arturo Prat.
Miguel Grau.

La Guerra del Pacífico fue un enfrentamiento bélico que marcó para siempre a Chile, Perú y Bolivia. Pero dentro de todo lo malo que pudo haber sido una guerra, vale la pena rescatar -y preservar como un verdadero ejemplo de rectitud- la decencia y educación a toda prueba de don Miguel Grau, marino peruano que estaba al mando del poderoso monitor Huáscar. Una vez concluido el Combate Naval de Iquique, el almirante de dicho acorazado tomó pluma y papel y escribió una emotiva pero contundente carta para entregar sus condolencias a doña Carmela Carvajal, viuda de Arturo Prat. El respeto que sentían Grau y Prat era mutuo. Prat quedó inmortalizado como un mártir que pasó a la historia; Grau como el caballero de los mares que siempre fue.

Acá les dejo las emotivas palabras del almirante Grau a doña Carmela Carvajal. Frases simples pero estremecedoras. Claro, eran otros tiempos, y también otros valores y otra formación:

Monitor Huáscar

Al ancla, Pisagua, Junio 2 de 1879 Dignísima señora:

Un sagrado deber me autoriza a dirigirme a Ud. y siento profundamente que esta carta, por las luchas que va a rememorar, contribuya a aumentar el dolor que hoy justamente debe dominarla. En el combate naval del 21 pasado que tuvo lugar en las aguas de Iquique, entre las naves peruanas y chilenas, su digno y valeroso esposo, el capitán de fragata don Arturo Prat, comandante de la “Esmeralda”, como usted no lo ignorara ya, fue víctima de su temerario arrojo en defensa y gloria de la bandera de su patria. Deplorando sinceramente tan infausto acontecimiento y acompañándola en su duelo, cumplo con el penoso y triste deber de enviarle las para usted inestimables prendas que se encontraron en su poder, y que son las que figuran en la lista adjunta. Ellas le servirán indudablemente de algún consuelo en medio de su desgracia y por eso me he anticipado a remitírselas.

Reiterándole mis sentimientos de condolencia, logro, señora, la oportunidad para ofrecerle mis servicios, consideraciones y respetos con que me suscribo de usted, señora, muy afectísimo seguro servidor.

Miguel Grau

miércoles, 29 de enero de 2020

Megatherium: La "gran bestia" era un perezoso gigante

Considerado uno de los mayores mamíferos terrestres que ha existido, este herbívoro de carácter apacible dominó buena parte de la actual Sudamérica durante el período conocido como Holoceno

Hace recién unos 8 mil años dejó de existir una de las criaturas más fantásticas que han habitado nuestro planeta: el imponente Megatherium, animal peludo de gran tamaño cuyo nombre significaba "La gran bestia". Pese a su intimidante denominación y sus magníficas dimensiones de seis metros de largo y dos de altura en cruz desde el piso hasta el lomo, el Megatherium era un mamífero tranquilo y herbívoro, que rara vez atacaba a otros animales (salvo cuando se veía acorralado).

Un animal gigante y peludo

Los primeros restos del extinto Megatherium fueron encontrados en 1788 en la actual Argentina. También se han podido hallar osamentas de este ser en diversos puntos de Sudamérica, como Chile, Brasil, Perú y Paraguay. Se ha logrado constatar que uno de estos mamíferos peludos llegaba a pesar más de tres toneladas, siendo casi del tamaño de un elefante asiático contemporáneo. De más está decir que este corpulento animal del Holoceno es considerado el perezoso más grande que ha existido.

El Megatherium se alimentaba de frutos y semillas, las cuales no los sacaba directamente de las ramas de los árboles, sino que remeciendo los troncos con violencia para esperar a que estos cayeran al suelo. Si bien tenía unos brazos robustos provistos de garras muy largas y duras, no los usaba como armas: en realidad le servían para remover la tierra en búsqueda de tallos, tubérculos y raíces. Solamente en casos extremos era capaz de demostrar su descomunal potencia física para defenderse de algún adversario.